Tomalá-Parrales, M.
Vol.11-N°2, Julio - Diciembre 2023
p-ISSN:2602-8204 |e-ISSN 2737-6257
cias Económicas de la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí
(ULEAM), participante del Proyecto “Caracterización Socioeconómi-
ca del sitio San Juan de Manta y Las Gilces del cantón Portoviejo”.
Contiene tres partes: La primera relacionada a las caracterís-
ticas de las viviendas; la segunda, para determinar los problemas
ambientales y la tercera, para obtener datos de las familias. Tiene
un cuestionario como instrumento de recolección de datos dividido
en dos formularios que en conjunto recogen un total de 69 pregun-
tas de tipo cerradas, abiertas y de opción múltiple. Se aplicó a 619
familias de 524 viviendas encuestadas.
De la base de datos y los respectivos tabulados se toman los
resultados obtenidos en las preguntas del formulario encuesta Vi-
vienda, de manera específica en la pregunta 1, 4, 11 a la 14. También
se consideró respuestas del formulario de encuesta Familia, en las
preguntas 1, 27 y la 38. Con esto se realizó la descomposición de las
respuestas otorgadas que constan en las bases de datos respectivas
y se obtuvieron resultados que se analizan más adelante.
De igual forma se aplicó metodología para el cálculo de los co-
eficientes de cobertura para los principales servicios básicos que
recibe el sitio San Juan de Manta: energía eléctrica, agua potable,
recolección de basura, telefonía fija y móvil, internet, televisión por
cable. Una vez obtenido se realiza comparación los datos de la ciu-
dad de Manta y Ecuador, partiendo del criterio expresado por la Sub-
secretaría de hábitat y asentamientos humanos (SHAH, 2015) que
señala que “la cobertura de los servicios básicos es un indicador cla-
ve para identificar la habitabilidad de los asentamientos humanos
y los avances que se han dado en términos de calidad del entorno
urbano.
4|DISCUSIÓN DE RESULTADOS
4.1 |Servicios básicos en Ecuador
Ecuador es uno de los países latinoamericanos que, históri-
camente, ha asumido problemas para alcanzar un verdadero creci-
miento y desarrollo económico, afectando para que la generación
del bienestar social sea limitada influyendo negativamente en la ca-
lidad de vida de la población. Este aspecto se genera con mayor
profundidad en los territorios pequeños donde la acción de la ges-
tión pública tiene dificultades para llegar y mejorar la participación
estatal.
Lo anterior se verifica con el análisis de datos provenientes del
Censo de Población y Vivienda del 2010 y otras fuentes comple-
mentarias más actualizadas. Las estadísticas señalan que en Ecua-
dor el 93,19 % de los hogares tenían energía eléctrica proporciona-
da por la empresa pública, la Corporación Nacional de Electricidad
(CNEL). Mientras que un 5,23 % no posee servicio de energía eléc-
trica en sus hogares.
El 1 % de la población registrada manifestaron que utilizan
energía eléctrica porque otras se lo proveen. Hay una pequeña pro-
porción de la población del 0.4 % que se abastece de energía me-
diante generador (es decir, planta eléctrica). Finalmente, un 0.16 %
restante de la población ecuatoriana obtiene energía mediante la
utilización de panel solar. Un dato más actualizado del Ministerio
Coordinador de Sectores Estratégicos (2016) señalaba que en lo re-
ferente al acceso a electricidad, la cobertura eléctrica se incrementó
notablemente en relación a 2010 pasando a 97,2 % en 2015, lo que
representó que más de 900 mil nuevas familias en el Ecuador cuen-
ten con servicio eléctrico, recalcando que con esta cobertura, el país
se encontraba sobre la media de la región, la cual era de 94,8 %.
Para el abastecimiento de agua los datos del Censo poblacional
2010 señalaban que el 71,9 % de la población ecuatoriana reciben
el agua mediante red pública; el 11,5 están conectados mediante
pozo; el 9,7 % se abastecen mediante rio, vertiente, acequia o canal;
el 5,1 % se abastecía mediante el carro repartidor y el 1,7% restan-
te de la población lo hacen mediante aguas lluvia. De acuerdo con
datos del INEC (2016) a diciembre de 2016 este porcentaje se había
incrementado a 82,3 % a nivel nacional.
Estos resultados, si bien es cierto indican que ha mejorado la
cobertura de agua mediante la red pública, al igual que los otros ser-
vicios aún mantiene un porcentaje considerable de viviendas que
carecen del mismo lo que significa que aún se deben hacer esfuer-
zos porque existen zonas geográficas que aún padecen del abaste-
cimiento nulo o irregular de este principal servicio.
En relación con el servicio de recolección de basura, el 76,9%
era desechada de los hogares mediante el carro recolector, el 15,5 %
la quemaban, el 4,5 era arrojada en terrenos baldíos, el 1,50 % la en-
terraban, 0,8 % dice de otra forma y el 0,7% la arrojan al rio o ace-
quia. A pesar de la gran cantidad de desechos que se producen en
los territorios estos resultados evidenciaban que las instituciones
públicas encargadas del servicio de recolección aún no alcanzaban
a cubrir la totalidad de la población, lo que se contrapone con lo que
estable el Articulo 264 y 314 de la Constitución.
Es importante indicar que actualmente la recolección de dese-
chos sólidos a nivel país, dentro del modelo de gestión establecido
por los GAD municipales este servicio es gestionado en cuatro for-
mas. Datos de INEC (2015) indican que “durante este año 184 GAD
Municipales gestionaron sus residuos sólidos a través de unidades,
departamentos o direcciones del GAD, cinco (5) lo hicieron como
mancomunidad, 12 lo realizaron mediante Empresas Públicas y 20
a través de Empresas Públicas Mancomunidades, que son aquellas
empresas en la cuales intervienen dos o más GAD Municipales” (p.9).
En este sentido según INEC (2020) el 83,4 % señalan que la elimina-
ción de la basura la realizan a través del servicio municipal.
Por su parte, el servicio de alcantarillado en el país ha tenido
un mejoramiento muy lento y distante de la media latinoamerica-
na. Los resultados del Censo 2010 señalan que solo el 53,59 % de
la población ecuatoriana estaba conectada mediante red pública de
alcantarillado; el 23,9 % mediante pozo séptico; el 10,1% están co-
nectados a pozo ciego; el 7,9% no posee; el 2,7 % posee letrina y
el 1,7 % restante de la población hace sus descargas directamente
al mar, rio, lago o quebrada. Con los datos de la Encuesta Nacional
de Empleo, desempleo y subempleo INEC (2020)) con una muestra
de 17.001 viviendas se determina que el 64,1 % tienen servicio de
alcantarillado, el 26,9 % mediante pozo séptico y el restante entre
pozo ciego y letrina.
Otro aspecto importante de los resultados del Censo 2010 es
que en Ecuador el 66.7 % de la población no contaba con telefonía
convencional, mientras que el 33.35 % restante si lo tenía. Este re-
sultado coincide en gran parte con el que ofrece el INEC (2017) a
través de un informe del uso de las TICS de la Encuesta Nacional
de empleo y desempleo (ENEMDU-2017) que indica que en Ecua-
dor de un 42,4 % de hogares que manifestaron tener teléfono fijo
en 2012 pasaron a un 36,9 % de hogares en 2017. En Finanzas Po-
pulares (2015) se recoge opinión del experto Nelson Valero, quien
“explica que las nuevas tecnologías han llevado a que el concepto
del teléfono fijo haya iniciado su declive desde hace unos 10 años
en la medida en que los usuarios han sustituido su funcionalidad por
la telefonía móvil, la telefonía IP y el video sobre IP, entre otros”.
En cuanto el acceso a internet de los hogares ecuatorianos,
los datos del Censo de Población y Vivienda 2010, en Ecuador el
86.97 % de la población no contaba con este servicio básico, mien-
tras que el 13.03 % restante si tenía cobertura. Estas cifras, debido
al desarrollo de la tecnología y las inversiones que se han realizado
en el país ha mejorado sustancialmente. Según el INEC (2018) el
porcentaje de hogares a nivel nacional con acceso a internet llegó al
37,2 % en 2018, siendo a nivel urbano donde se registra un mayor
acceso con el 46,6 %, mientras que en el área rural apenas el 16,1 %
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